KIBO, haciendo que los niños se diviertan programando robots
Hay dos sitios donde los mas niños pasan mucho tiempo divirtiendose, los parques infantiles y las cunas, los primeros son espacios abiertos para los niños pequeños donde juegan y aprenden. En ellos se promueve la exploración del entorno físico, el desarrollo motor y las habilidades sociales con otros niños, todo esto permite que los niños sean más autónomos y creativos. Los segundos en cambio son espacios limitados donde el niño esta “confinado” y aunque son lugares seguros el niño tiene pocas posibilidades para la exploración y la interacción con otros niños.
https://www.youtube.com/watch?v=-MpAvThAM4k#t=43
En el video que os mostramos mas abajo la profesora de ciencias de la computación y Desarrollo Infantil de la Universidad de Tufts, y una de las personas que esta detrás de ScratchJr. , Marina Umaschi Bers nos explica su proyecto KIBO, un kit robótico que enseña a programar robots sin necesidad de pantallas, tablets o teclados.
Utilizando KIBO, los estudiantes usan bloques de madera para dar a los robots ordenes simples, en una secuencia de aprendizaje de procesos, una de las habilidades más importantes para los grupos de edad temprana. Mediante la combinación de una serie de comandos, los niños hacen que el robot se mueva, baile, cante, perciba el medio ambiente o se ilumine.
Con una subvención de Investigación Innovación NSF para Pequeños Negocios, Bers cofundó KinderLab Robótica y, usando el trabajo de sus 15 años de investigación, transformaron su primer prototipo KIBO en un juguete CyberLearning ampliamente disponible para que llegue a un gran número de niños.
Se crearon 100 unidades de KIBO en 2014, pero, según Bers, la construcción y venta de KIBO sólo era una pequeña parte del reto.
«No queremos regalar la tecnología y olvidarnos de esa persona», dijo Bers. «Queremos enseñarla»
Por esa razón, KIBO viene con un plan de estudios completo con lecciones, revistas, y un plan de formación para profesores y padres.
En marzo de 2015, los creadores de KIBO publicaron los resultados de ocho semanas de seguimiento a preescolares y demostraron que los niños fueron capaces de dominar la robótica básica y las habilidades de programación, mientras que los niños mayores eran capaces de dominar conceptos cada vez más complejas utilizando el kit de robótica durante la misma cantidad de tiempo.