Arduino vs Raspberry Pi, ¿Cuál te compras para tu proyecto?
Arduino y Raspberry Pi, veremos cual de los dos es mejor para tu proyecto
Si estás dando tus primeros pasos en el mundo maker seguro que has empezado a oír hablar de las dos plataformas de las que vamos a tratar en este artículo, Arduino y Raspberry Pi. La Raspberry Pi ha sido el ordenador británico más vendido durante los últimos años y Arduino ha estado transformando y aumentando la comunidad maker y del hazlo tu mismo o DIY. Aunque no faltan opciones diseñadas para proporcionar un control electrónico sobre los proyectos en el mercado, la económica y potente Raspberry Pi y la plétora de soluciones bajo la marca Arduino son sin duda dos de las más populares.
Pero comparar los dos puede ser algo muy difícil, ya que aunque a menudo converjan en proyectos la mayoría de las veces sirven para cosas distitntas por razones muy diferentes.
Así que vamos a enfrentar a Arduino vs Raspberry Pi para ayudarte a identificar qué comprar para tu próximo proyecto.
Empecemos con la Raspberry Pi
A todos los efectos, la Raspberry Pi es un ordenador totalmente funcional. Tiene todos los rasgos de un ordenador,
- con un procesador dedicado,
- memoria
- un controlador de gráficos
- y su salida a través de HDMI.
- Incluso ejecuta una versión optimizada del sistema operativo Linux llamada Raspbian.
- La mayoría del software de Linux es fácil de instalar,
- y permite utilizar el Raspberry Pi como un sinfín de cosas como por ejemplo algo muy habitual como emulador de videojuegos con una pequeña cantidad de esfuerzo.
- Aunque la Raspberry Pi no ofrece almacenamiento integrado, puedes usar tarjetas microSD para almacenar cualquier sistema operativo que elijas, ya sea Raspbian, Ubuntu Mate o incluso la versión de Windows 10 de Internet of Things. Esencialmente, se puede instalar diferentes sistemas operativos en diferentes tarjetas microSD para intercambiar plataformas, probar actualizaciones y depurar software.
- Y como la tarjeta incluye conectividad Wi-Fi y conectividad basada en Ethernet, también puedes configurarla para que tenga acceso a través de SSH o transferirle archivos mediante FTP.
Hasta la redacción de este artículo, hay seis versiones de Raspberry Pi que se pueden comprar, pero en general hay solamente dos factores que la vienen a diferenciar: el tamaño y la potencia. Los modelos más recientes son el modelo B de la tercera generación del mismo tamaño con un precio en torno a 40 euros, y la Pi Zero, miniatura de la Raspberry por solo 5 dolares. Para este último, puedes comprar una versión con Wi-Fi y Bluetooth por un poco más. Las otras tres placas Raspberry Pi en el mercado son modelos de tamaño completo de generación más antigua: Gen2 Modelo B, Gen1 Modelo B+, y Gen1 Modelo A+ más antiguo.
Como se ve, los diferentes modelos de Raspberry Pi vendrían a ser el cerebro de los proyectos. Por ejemplo, lo podemos ver en un artículo anterior en el que veiamos como se usa la Raspberry Pi para construir ordenadores basados en Linux y que funciona con el Raspberry Pi 3 u otros modelos anteriores.
También detrás de la Raspberrry Pi hay una gran comunidad mundial que puede guiarte en la dirección correcta para construir proyectos desde cero, como Game Boy Zero, un Macintosh en miniatura que funciona con total normalidad, el Pip-Boy de Fallout 4 y mucho más.
Vamos con Arduino
A diferencia de la Raspberry Pi, las placas Arduino son microcontroladores, no ordenadores completos. No ejecutan un sistema operativo completo, sino que simplemente ejecutan código escrito tal y como lo interpreta su firmware. Se pierde el acceso a las herramientas básicas que proporciona un sistema operativo, pero por otro lado, ejecutar directamente código simple, y no tan simple, es más fácil, y se logra sin sobrecargar el sistema operativo.
El propósito principal de la placa Arduino es interactuar con sensores y dispositivos, por lo que es ideal para proyectos de hardware en los que simplemente quieres que las cosas respondan a varias lecturas de sensores y entradas manuales. Puede que no lo parezca a simple vista, pero en realidad se trata de un sistema muy sofisticado que te permitirá gestionar mejor tus dispositivos dentro de un proyecto. Es ideal para interactuar con otros dispositivos y actuadores, donde un sistema operativo completo sería excesivo para manejar acciones simples de lectura y respuesta.
Pero como Arduino no es el «cerebro» de tu proyecto, las soluciones no solo son unas pocas placas como pasa con la Raspbery Pi. En cambio, hay muchas soluciones en el mercado de productos de nivel básico, dispositivos avanzados, proyectos de Internet of Things, educación, para prendas de vestir e impresión en 3D. Por supuesto, todos tienen procesadores, memoria y, en algunos casos, almacenamiento, pero están diseñados para servir como controladores, no como ordenadores en miniatura.
Grandes ejemplos de proyectos de Arduino se pueden encontrar aquí. En esos proyectos podrás encontrar desde sencillos como poder controlar una barrera de mini tren a otros en el que podrás basarte en Arduino para poder realizar una replica del robot de Star Wars. Otro proyecto transforma una pistola Nerf Vulcan en una torreta centinela que puede rastrear a los enemigos. Los dispositivos Arduino pueden incluso ser usados para añadir un escáner de huellas dactilares a un abridor de puertas de garaje. Muchos kits de robots para niños que puedes comprar en Amazon y que hemos visto en nuestra web están basados en la plataforma de software y hardware de Arduino.
Hablemos de potencia
Los dos sistemas tienen requisitos de potencia muy diferentes. Para empezar, la placa Raspberry Pi 3 Modelo B usa 1.5 vatios cuando está inactiva, y hasta 6.7 vatios cuando un monitor, teclado y ratón están conectados. La Raspberry más pequeña Pi Zero W consume 0,5 vatios de energía cuando está inactiva, y 1,75 vatios cuando se conecta un monitor, teclado y ratón.
Ambas placas de Raspberry Pi requieren cinco voltios para permanecer encendidas, por lo que necesita un adaptador de pared o un paquete de baterías recargables con un voltaje más alto. Por ejemplo, la mayoría de kits de Raspberry que puedes encontrar en el mercado vienen con una batería interna recargable que se conectaba directamente a la placa. Estas baterías incluyen un puerto Micro USB adicional para recargar a través de un adaptador de pared o utilizar el dispositivo como cualquier otro PC conectado a la red eléctrica.
Mientras tanto, los dispositivos Arduino comienzan a ejecutar código cuando se encienden, y se detienen una vez que desconectas el cable. Para añadir funcionalidad, puedes cablear directamente a los pines de la placa Arduino, o apilar chips o módulos llamados «shields» en la parte superior de la unidad base. Hay cientos de shields, cada uno de los cuales está diseñado para realizar una tarea diferente, interactuar con ciertos sensores y trabajar entre sí para construir una unidad de control completa.
Por lo tanto, para Arduino, sólo necesitas un paquete de baterías que mantenga el voltaje por encima de cierto nivel, junto con un módulo básico para administrar la energía. Incluso si la energía cae en el Arduino, no terminarás con un sistema operativo corrupto u otros errores de software: simplemente comenzará a ejecutar código cuando se conecte de nuevo. En el caso de Raspberry Pi, debes apagarlo dentro del sistema operativo como cualquier otro equipo, ya que de lo contrario se corre el riesgo de corrupción y problemas de software.
La conectividad
La Raspberry Pi 3 tiene un puerto Ethernet incorporado y conectividad inalámbrica N, que permite un fácil acceso a cualquier red con poca configuración. Una vez conectado, puedes utilizar el sistema operativo para conectarte a servidores web, procesar HTML o publicar en Internet. Incluso puedes utilizarlo como VPN o servidor de impresión.
Desafortunadamente, los dispositivos Arduino normalmente no están construidos para conectividad de red directamente desde la placa, salvo algún modelo. Aunque es posible, requieren un poco más de potencia para establecer una conexión adecuada. Necesitarás un chip extra equipado con un puerto Ethernet, y necesitarás hacer algo de cableado y codificación para que todo funcione correctamente, lo que es suficiente para que algunos proveedores vendan dispositivos basados en Arduino con un componente Ethernet incorporado.
Los sensores
Mientras que los dispositivos Raspberry Pi y Arduino tienen un número de puertos de interfaz, la conexión de sensores analógicos a dispositivos Arduino es un proceso más fácil. El microcontrolador puede interpretar y responder fácilmente a una amplia gama de datos de sensores usando el código que el usuario pone en él, lo cual es estupendo si tiene la intención de repetir una serie de comandos o responder a los datos de los sensores como una forma de hacer ajustes a los servos y dispositivos.
Las placas Raspberry Pi, por otro lado, requieren software para interactuar eficazmente con este tipo de dispositivos, que no siempre es lo que se necesita si sólo se trata de regar las plantas o mantener la cerveza a la temperatura adecuada. Usar ambos en un proyecto es algo habitual, ya que el dispositivo Arduino podría actuar como una placa de control que ejecuta comandos emitidos por el software de Raspberry Pi antes de que la información del sensor sea retroalimentada para su grabación o reconocimiento.
Arduino vs Raspberry pi, en resumen
Entonces, ¿cuál es la solución adecuada para tí? La respuesta dependerá en gran medida del proyecto que tengas pensado realizar.
- Deberías tomar la opción de Arduino si la tarea principal consiste en leer los datos de los sensores y cambiar los valores de los motores u otros dispositivos. Dados los bajos requerimientos de energía y mantenimiento de los dispositivos Arduino, también son una buena opción si tu proyecto se ejecuta continuamente, y requiere poca o ninguna interacción.
- En cambio debes elegir la Raspberry Pi si tu proyecto implica una tarea que se realizaría de otra manera en una ordenador personal. Las placas Raspberry Pi hacen que una gran cantidad de operaciones sean más fáciles de administrar, ya sea que desees conectarte a Internet para leer y escribir datos, ver medios de cualquier tipo o conectarte a una pantalla externa.
- Pero dado que los dos dispositivos realizan tareas diferentes, el uso de ambos en algunos casos es ideal. Como ejemplo opcional, Raspberry Pi podría darte acceso desde el lado del cliente a la configuración y al código, mientras que un microcontrolador Arduino podría manejar la activación de dispositivos y recopilar datos de los sensores. Hay varias maneras de hacer la conexión, ya sea que prefieras USB, una red local, o ejecutando algunos de los puertos de E/S en el dispositivo Arduino en la placa Raspberry Pi.
Ahora te toca a ti, explícanos en los comentarios por que opción te decidiste a la hora de realizar tu proyecto.
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